24 octubre 2008

El árbol de los amigos





Existen personas en nuestras vidas, que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino. Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, mas otras apenas vemos entre un paso y otro.
A muchas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos. Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos. Los primeros que nacen del brote, son nuestros amigos papá y mamá quienes nos muestran mucho acerca de lo que será la vida.
Después vienen los amigos hermanos y primos, con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros. Pasamos a conocer a toda la familia de hojas quienes con cariño y respeto también nos enseñan el camino.
Mas el destino nos presenta a otros amigos, los cuales no sabemos que irán a cruzarse en nuestro camino. A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, del corazón.

Los reconocemos por que son sinceros..."verdaderos"... Saben cuando estamos o no estamos bien, saben lo que nos hace feliz y también lo que nos aflige.
Y a veces uno de esos amigos del alma, conquista nuestro corazón, se acerca a nosotros de una manera un tanto diferente, logrando un brillo especial en nuestros ojos, poniendo música a nuestros labios y saltos a nuestros pies.


Mas también, hay de aquellos amigos por un tiempo, tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas que acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro durante el tiempo que estamos cerca. Y hablando de cerca, no podemos olvidar a nuestros amigos distantes: aquellos que están en la punta de las ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra.
El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas, muchas de las cuales quisiéramos que se quedaran por siempre, algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones.
Pero lo que nos deja mas felices es que las que cayeron continúan cerca, alimentando nuestra raíz con alegría.

  • Son recuerdos de momentos maravillosos, de cuando se cruzaron en nuestro camino.

  • Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, éxito, suerte y prosperidad. Hoy y todos los días...

  • Hoy se que cada persona que pasa por nuestras vidas es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros.
  • Habrá los que se llevaran mucho!!!, Pero no habrá de los que no nos dejaran nada.


Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad .

Dedicado a, Juán Andrés F. C

New Fronteras

No hay comentarios: